miércoles, 27 de octubre de 2010

SALVAJISMO EN EL HUASIPUNGO

Para ser honesta me fue un poco difícil encontrar el primer tema para mi artículo, ya que a decir verdad no sé mucho de literatura ecuatoriana, lo favorable es que disfruto de la lectura en mis tiempos libres y es por esto que decidí pedir ayuda, una recomendación de algun libro que haya marcado de una u otra forma la historia y la literatura del Ecuador; me pareció interesante conocer la historia aborigen, pero una escalofriante intriga me perturbaba al conocer medianamente sobre la colonización y como los españoles se aprovecharon de nuestros indígenas y sus tierras, es por esto que decidí leer HUASIPUNGO de Jorge Icaza.

HUASIPUNGO es un libro que refleja la esclavitud a la que fueron sometidos nuestros indígenas; la sed y el hambre de los terratenientes y curas por llenar sus bolsillos de dinero y fortuna sin importar el sacrificio humano que esto involucre.
A pesar de ser un libro de lenguaje un poco complejo -pues ciertas partes está hablado en quichua- tuve la facilidad de la web para ayudarme a comprenderlo y así poder transmitirles a ustedes, mis lectores, las emociones y sentimientos que percibí al leer dicha novela.

Puedo añadir que es una novela completamente interesante, mantiene al lector "sumergido" dentro de la obra; a mi parecer a veces un poco chistosa porque me encontraba con diálogos que al leerlos me imaginaba a mis amigos de la sierra diciendo lo mismo, con ese acento andino que favorablemente aun no se ha perdido, y mientras más uno avanza con la lectura llegas incluso a sentir algo parecido a lo que quizas Jorge Icaza sintió mientras escribía, una sensación de dolor y sufrimiento si te pones en lugar de los indios; maldad, ambición y avaricia si te pones en el lugar del hacendado Alfonso Pereira y sus aliados.
Alfonso Pereira sobrino de Julio Pereira, este último convence a Alfonso de internarse en la selva con su familia para iniciar una explotación de madera y petróleo para pagar las deudas que Alfonso tenía, al principio todo era “color de rosa” para nuestros indígenas, eran bien tratados, bien cuidados, Alfonso era compasivo, hasta que su esposa e hija deciden regresar a la ciudad, es ahí cuando este personaje da un vuelco y empieza con los abusos, ultrajes y violación de indias.
Manda la construcción de una carretera con el fin de conexionarse con la civilización para realizar el comercio, el terrateniente a cargo toma una cruel técnica para apresurar dicha obra la cual cobró muchas vidas indígenas, pero astutamente planificó distracciones como por ejemplo peleas de gallos y “distribución” de aguardiente -el libro lo llama: "embrutecimiento del indígena a través del alcohol"-  para que así la gente olvide una lamentable realidad.
Es triste el simple hecho de tratar de imaginar las condiciones de vida –deplorables- de nuestros indios, los niños jugaban con su propio excremento mezclándolo con sus orinas para formar una masa, mientras las madres eran sometidas a trabajos forzosos distrayéndolas de cumplir con sus deberes de madres; aquel individuo que ponía resistencia era castigado de tal forma que a nadie más se le ocurriría cometer la misma falta, aun así estuviesen heridos debían trabajar, es decir no existía excusa valida en el planeta para que cesen de sus labores, tal es el caso de Andrés Chiliquinga (protagonista de la novela), un indio que ejerciendo su trabajo se cortó el pie con un hacha, fue tratado por un curandero local para su sanación pero en vez de reposo le asignaron de igual manera trabajos aunque de menor esfuerzo mientras se recuperaba.
El desinterés del terrateniente por saciar al menos la hambruna teniendo los recursos para hacerlo es algo inhumano, quizás la ignorancia de una mayoría fue el motivo principal para que ocurran estos tratos animales, aunque ni los animales! porque estos al menos debieron ser alimentados quizás porque sabían que en un futuro serían el propio alimento de los españoles, es decir iban a obtener un beneficio en base a esa “inversión alimenticia”.
Continuando con este resumen de la novela aparece otro personaje, El Cura, astuto, manipulador, cobraba fuertes sumas de dinero para la misas, de esto fue víctima Andrés ya que su mujer, La Cunshi después de morir no pudo ser sepultada ya que el cura solicitó a Andrés primero el pago al contado para realizar la respectiva misa.
Era el único poseedor de buses para la transportación de mercaderías e indios, cobraba grandes cifras para que esto se de a cabo, hasta para dar un consejo solicitaba dinero, representando así de manera fatal a la iglesia.
La llegada de los gringos significaba una luz en aquella penumbra, quizás una liberación de aquella esclavitud, pero cuando al fin arribaron, la situación empeoró; los gringos llegaron a reunirse con Alfonso Pereira para solicitar una limpieza del huasipungo para así llevar a cabo la construcción de sus lujosas casas, este hecho provocó un levantamiento indígena y la verdad es que no se podía esperar menos de esto, era algo lógico, todos los seres humanos llegamos a un límite, y aun con la ignorancia en sus mentes sabían que lo que estaban viviendo era ni más ni menos una tortura que parecía no tener fin; asesinaron a 5 integrantes de la burguesía lo cual provocó que se pidieran refuerzos de Quito para recobrar el control en el huasipungo, es aquí cuando se inicia una espeluznante masacre indígena, una matanza a sangre fría que dejaría como resultado charcos de sangre en aquellos pantanos y calles.
En fin, a decir verdad no existe excusa que justifique estos hechos; el sentido común, la compasión o el amor al prójimo definitivamente no predominaron en aquellos tiempos, lo que el libro refleja es sino la avaricia y el deseo del poder de extranjeros caprichosos y abusivos además de la desdicha del indio americano sometido a una marginación social a acusa de una "dictadura colonial". 
Gracias a Dios hoy en día se puede decir que la existencia de los derechos humanos y entidades que protegen a la sociedad han mermado este tipo de maltratos, aunque es imposible negar que aún se den.
Jécola.